martes, 13 de mayo de 2008

Barra Brava (Todo tiempo pasado fue mejor)


Actualización 24.10.13
Hace mucho que Barra Brava dejó de existir pero cada vez que paso por la calle Berlín no pudo evitar sentir algo de nostalgia.

Vista del local original
En la prehistoria del blog Barra Brava fue uno de mis lugares favoritos para comer. No por el hecho que sirvieran platos con nombres relacionados con el deporte rey, tampoco la decoración con motivos de fútbol, menos las transmisiones de los partidos. Me gustaba porque era el lugar para comer platos repletos de calorías y acompañados de un buen trago. Para cenar con la enamorada, para tomarse unas cervezas con los amigos, para almorzar un domingo, era un restaurante que servía en cada una de estas situaciones. Hasta ahora me acuerdo de su salchipapas Boca Juniors (papas fritas, salchichas frankfurters y dos huevos fritos encima), del Chilavert (papas fritas, dos hamburguesas coronadas con tiras de tocino y huevos fritos) y el elegante Capitán de América (filete de pechuga al oreganato acompañado, nuevamente de papas fritas). ¿Ya ven? ¿Dónde se encuentra ahora ese tipo de platos?

Pero con el tiempo su calidad fue decayendo. Cuando pedí un Chilavert la carne de la hamburguesa tenía un sabor muy fuerte, casi diría hasta descompuesto. Lo atribuí a una mala casualidad. Pero meses después una nueva visita terminó de convencerme de que para este lugar las épocas de gloria ya habían pasado. Fui con una amiga y aparte de servirme un plato terriblemente desabrido (tan malo que no me acuerdo el nombre) el nivel de servicio fue muy pobre. En los últimos meses ví una banderola que anunciaba el lanzamiento de su “combinación criolla” a 15 soles. Mala señal. Tengo la teoría de que restaurante que promociona sus platos mediante una gigantografía es porque está dando sus últimos manotazos de ahogado.

Que pena por Barra Brava. Pasé muy buenos momentos en este restaurante, pero quizá el desgaste de su imagen, el pobre intento de relanzar la carta, y la mala atención en mi última visita me han quitado las ganas de volver a pisar su local.

jueves, 8 de mayo de 2008

Pio’s Chicken (Errar es humano)

Actualización 24.10.13
¿Ir a una pollería de marras sólo porque su mascota aparece en un programa cómico?  Bueno, todos cometemos errores.


¿Quién no ha escuchado hablar de este lugar? Se hizo famoso porque su mascota aparece todos los sábados en un programa cómico para ser vapuleada salvajemente por los extras al mejor estilo de apanado colegial. Para mí hubiera seguido pasando desapercibido si no fuera porque leí un artículo del diario El Comercio. Una frase llamó mi atención: El 80% de las llamadas a su delivery son de las zonas más exclusivas de La Molina. "Algo bueno debe tener esta pollería" pensé después de leer esa afirmación. Olvidé aquella frase que dice “papel aguanta todo” y sobre todo cuando la dice el dueño del local. ¿A que se habrá referido ese sujeto con “exclusivas”?


Intrigado por la frase de marras decidí visitar esta mentada pollería. Fue un fracaso absoluto. El local está bastante descuidado, los alrededores no son nada seguros y llegar hasta allá fue un viaje interprovincial. Tuve la genial idea de ocupar una mesa en el segundo piso, lo que en pleno verano y a pesar de los ventiladores, fue lo mismo que almorzar en un sauna. El pollo es tan malo que no vale la pena comentar nada. Las papas ni siquiera estaban bien fritas, parecían sólo remojadas en aceite y lo peor, cortadas tamaño familiar. De la atención no vale la pena comentar nada. En fin, errar es humano y para eso está el blog, para que ustedes no cometan los mismos errores que yo.

Pio's Chicken queda en Urb. Los Portales de Javier Prado Mz. N Lote 24.

Volvería: Ni gratis.