¿Qué sucede cuando se encuentran dos bloggers, ambos de exquisito paladar y con el mismo ánimo de escribir sobre los mejores lugares para comer? ¿Cuál sería el restaurante-campo de batalla escogido? Estimados lectores, con ustedes el Blue Moon. En un lado de la cancha: El vicio de comer. En el otro: La secta del tenedor. La mesa está servida para la final del primer Grand Slam del año.
El Blue Moon es un restaurante excepcional. El ambiente es elegante, clásico y lo han decorado con botellas de todos los tamaños, formas y colores. Ofrece un buffet de comida internacional con platos que no he visto en ningún otro restaurante. Para que se den una idea, en la entrada hay una vitrina donde se exhibe una pierna de jabalí entre otros manjares. La variedad de platos es tan grande que no bastará un post para describirlos. Además no todo es comida internacional porque también ofrecían un intrigante plato: picante de vizcacha.
En la estación de entradas frías hay salames, jamones y prosciuttos de ingredientes impensables (jabalí, venado, etc.) Todos esos delicatessen que uno siempre ve en Wong y nunca compra por sus precios prohibitivos. También hay gran variedad de quesos y de piqueos fríos cuyo ingrediente principal eran las aceitunas. Me serví de puro curioso el prosciutto de jabalí y no era desagradable pero su sabor era muy fuerte y hubiera sido ideal combinarlo con un buen vino. Igual me pasó con los quesos. El sabor es, para decirlo de algún modo, agresivo.
Pasé a la estación de guisos dónde me serví enrollado de jabalí, pato a la naranja, venado al champagne y lechón al horno. El lechoncito de leche es la mejor carne de cerdo que he probado nunca. Parte magra, parte de grasa y un pellejo crocante hacen de este plato tan simple el número uno en mi lista. El pato a la naranja y el venado estuvieron muy buenos, de sazón suave y un buen punto de cocción. El jabalí si que fue toda una novedad porque, así lo sentí, la carne tenía sabor a tierra. No era desagradable pero me imagino que eso es lo que comerá el pobre animal. En la estación de pastas me quedo con los clásicos ravioles con tajadas de asado que tenían ese toque especial que sólo pueden encontrar en los restaurantes italianos.
En la mesa de postres me quedo con la leche asada cuyo sabor y aroma demostraban que había sido preparada con vaina de vainilla. No quiero ser injusto pero por su sabor y textura es lo mejor de la estación. La torta de Málaga, preparada con licor, también es recomendable. En cuánto a los cannoli no me agradó el sabor tan fuerte del queso. Lo siento pero los postres son dulces, no salados. Aún así y cómo verán en la foto hay para todos los gustos.
El punto más fuerte de este restaurante: la atención es correcta. Los mozos están pendientes de cualquier necesidad que uno tenga, hacen recomendaciones y resuelven cualquier duda que uno tenga sobre los platos. Su punto más débil: los platos son calentados en microondas. Asumo que por una cuestión de espacio no pueden instalar bandejas con baño maría pero es una falla que no puedo dejar de mencionar. Con el microondas se corre el riesgo de recocinar la comida y puede cambiar el sabor de algunos platos.
En conclusión volvería al Blue Moon por la oferta tan variada de platos, la curiosidad de probar nuevos sabores y la excelente atención que me dieron. El precio es elevado pero está compensado completamente. Ah! y me olvidaba, el resultado del partido fue 5-4 a mi favor. Gané en el tie-break por una rueda de postres.
Blue Moon queda en calle Pumacahua 2520, Lince.
Teléfono: 470-16311
Estación de fiambres |
En la estación de entradas frías hay salames, jamones y prosciuttos de ingredientes impensables (jabalí, venado, etc.) Todos esos delicatessen que uno siempre ve en Wong y nunca compra por sus precios prohibitivos. También hay gran variedad de quesos y de piqueos fríos cuyo ingrediente principal eran las aceitunas. Me serví de puro curioso el prosciutto de jabalí y no era desagradable pero su sabor era muy fuerte y hubiera sido ideal combinarlo con un buen vino. Igual me pasó con los quesos. El sabor es, para decirlo de algún modo, agresivo.
Estación de platos calientes |
Estación de postres |
El punto más fuerte de este restaurante: la atención es correcta. Los mozos están pendientes de cualquier necesidad que uno tenga, hacen recomendaciones y resuelven cualquier duda que uno tenga sobre los platos. Su punto más débil: los platos son calentados en microondas. Asumo que por una cuestión de espacio no pueden instalar bandejas con baño maría pero es una falla que no puedo dejar de mencionar. Con el microondas se corre el riesgo de recocinar la comida y puede cambiar el sabor de algunos platos.
En conclusión volvería al Blue Moon por la oferta tan variada de platos, la curiosidad de probar nuevos sabores y la excelente atención que me dieron. El precio es elevado pero está compensado completamente. Ah! y me olvidaba, el resultado del partido fue 5-4 a mi favor. Gané en el tie-break por una rueda de postres.
Blue Moon queda en calle Pumacahua 2520, Lince.
Teléfono: 470-16311
jaJAJAJAJAJAJAJA....DESGRACIADOOO.. no sabia ke ibas contando los platos ingeridos...jajajajajajaa...pucha.. si me ganaste..tu seguias repitiendo la leche asada cuando a mi ya se me salia el relleno de los canolli por las orejas,,jaja.
ResponderEliminarFue un placer compartir contigo tremendo buffet...que se repita..que se repitaa
Ja ja ja
ResponderEliminarNo te preocupes SDC. Te concedo el derecho al match de revancha.
Si fue un buen encuentro. Fijaremos fecha para el siguiente.
Saludos!
Quede maravillada por muchas cosas:
ResponderEliminar- Que hayan salido juntos a comer dos bloggers que leo, sin saber que se conocían...me pareció muy loco.
- Saber que el Blue Moon mantiene el mismo estilo y calidad de hace taaaannntos años.
- Ver esas fotos repletas de manjares y tus descripciones me dieron ganas de ir yo también.
Provecho!
Hola Katia
ResponderEliminarSi pues, sin saberlo resultó que era el asesor financiero de la SDC ja ja ja.
El Blue Moon es un restaurante impresionante. En la vida imaginé que iba a comer venado, jabalí y todo eso. En primer lugar está su EXCELENTE atención. Algo que rara vez se ve en el Perú.
Un abrazo!
Hace tiempo que me muero por ir, sé que es un sitio realmente excepcional.
ResponderEliminarhttp://flashificator.com/1/BlueMoon/
CYS
ResponderEliminarEs todo un tema probar carne de venado, jabalí, etc.
Tienes que darte una vuelta para sacarte el clavo.
Cuando vaya a Peru,
ResponderEliminarire ahi!!
x(!!!
tengo hambreeeeeeeeeeee!!
Gaby
ResponderEliminarOjala sea pronto porque como la comida del Perú no hay!
Renzo
ResponderEliminarQue buena idea la tuya de ir a este lugar!! hace tiempo que fui a este lugar y la verdad que deseo volver en su momento, pero después de leer tu blog pues creo que ya llego la hora de ir je je je.
Que buenas fotos y que rico se ven esos platos!! :) hmmm.
Ah y eso no se le hace a SDC ja ja ja
Besos
Ll
Ll.
ResponderEliminarSigue mi consejo y vuelve. Vale la pena por la gran variedad de opciones que hay.