Tal como lo prometí, luego de una larga ausencia, por fin estoy de vuelta. Me costó mucho trabajo dejar de lado mi querido blog pero tenía responsabilidades muy importantes que afrontar respecto a mi profesión. Responsabilidades que me llevaron fuera del país y que exigían de mí una dedicación absoluta pero que al mismo tiempo me permitieron recopilar gran cantidad de información sobre mi tema favorito: comer bien. Para mi apetito no existió la diferencia horaria, y en cuanto al idioma, con tenedor y cuchillo no hay pero que valga.
La primera parada fue en São Paulo, donde estuve involucrado en un proyecto regional en la afiliada brasileña de la empresa en la que trabajo. Las oficinas estaban ubicadas lejos del centro así que mi radio de acción estuvo limitado a la zona del hotel donde me alojé. De todos modos pude disfrutar de un encuentro muy genuino con la comida de diario que se consume en este país, así como la visita a un extraordinario restaurante de carnes y una experiencia con la gastronomía árabe, entre otras. También les contaré de un inesperado hallazgo en un mall de lujo. Bien dicen que las mejores experiencias son las que no se planean.
Luego estuve en Buenos Aires, donde asistí a una capacitación regional en temas contables aplicados a la industria. Estuve concentrado en un hotel cinco estrellas pero lamentablemente el cansancio y el clima le jugaron una mala pasada a mi salud. La ruta gastronómica será breve pero incluirá la primera experiencia del blogger con un maridaje de vinos argentinos, el encuentro con una queridísima amiga blogger, la reseña de un restaurante de carnes y un repaso a dos sitios muy clásicos. Demás está decir que también hablaré de Vasalissa, un sitio que es el paraíso de los amantes del chocolate.
Ahora sí me toca a ponerme al día con lo pendiente, cumplir con algunos compromisos y preparar lo que se viene, sendas aventuras gastronómicas en São Paulo y Buenos Aires.
La primera parada fue en São Paulo, donde estuve involucrado en un proyecto regional en la afiliada brasileña de la empresa en la que trabajo. Las oficinas estaban ubicadas lejos del centro así que mi radio de acción estuvo limitado a la zona del hotel donde me alojé. De todos modos pude disfrutar de un encuentro muy genuino con la comida de diario que se consume en este país, así como la visita a un extraordinario restaurante de carnes y una experiencia con la gastronomía árabe, entre otras. También les contaré de un inesperado hallazgo en un mall de lujo. Bien dicen que las mejores experiencias son las que no se planean.
Luego estuve en Buenos Aires, donde asistí a una capacitación regional en temas contables aplicados a la industria. Estuve concentrado en un hotel cinco estrellas pero lamentablemente el cansancio y el clima le jugaron una mala pasada a mi salud. La ruta gastronómica será breve pero incluirá la primera experiencia del blogger con un maridaje de vinos argentinos, el encuentro con una queridísima amiga blogger, la reseña de un restaurante de carnes y un repaso a dos sitios muy clásicos. Demás está decir que también hablaré de Vasalissa, un sitio que es el paraíso de los amantes del chocolate.
Ahora sí me toca a ponerme al día con lo pendiente, cumplir con algunos compromisos y preparar lo que se viene, sendas aventuras gastronómicas en São Paulo y Buenos Aires.