viernes, 16 de diciembre de 2011

Bonus Track II: Fiesta Gourmet

¡Fin de fiesta en Fiesta Gourmet! Pensé que sería buena idea terminar mis celebraciones de cumpleaños en un sitio que tiene las mejores credenciales como restaurante turístico y como representante máximo de la gastronomía lambayecana. Quizá también debí recordar que pertenece a Héctor Solis, uno de los abanderados de la gastronomía peruana y así hubiera evitado el chasco que me llevé con la especialidad de la casa.

Cebiche de mero asado
El almuerzo empezó con el cebiche de mero asado a la brasa de carbón sobre hojas de choclo, recomendado por el mozo como la mejor creación del chef. (Claro, no mencionó un pequeño detalle: también es la entrada más cara de la carta) La primera impresión es buenísima, suaves trozos de mero en un aderezo picante y acompañados de una yuquita que era un algodón en la boca. Pero luego del segundo bocado sentí que el sabor estaba en el límite exacto entre lo ahumado y lo quemado. El problema está en la panca de choclo que llego poco más que rostizada a la mesa. O le ponen más cuidado al tiempo exacto de cocción o le cambian el nombre a esta entrada.

Arroz con pato
Luego vino la estrella de almuerzo, el arroz con pato cocido al momento y servido en ollita personal. El mozo hace toda una ceremonia para servirlo, preámbulo que resultó innecesario, porque apenas lo probé sentí dos graves defectos: arroz crudo y un sabor muy fuerte a ajo. Devolví el plato a la cocina con la esperanza que lo arreglen pero fue tiempo perdido porque trajeron de vuelta lo mismo. Punto aparte para los trozos de loche crudos, algo muy desagradable. ¡Bravo! Fiesta le quita el primer lugar al Rincón que no conoces sirviendo el peor arroz con pato que he comido. Hubiera preferido que me lo sirvan en un plato de plástico pero que tuviera buen sabor.

Seguro que alguien dirá que tuvieron un mal día pero esa excusa me suena a chiste malo. Creo que Fiesta Gourmet, al formar parte del grupo de restaurantes "privilegiados" ya entró en una zona de comodidad que le permite cobrar y servir lo que quiera. En cuanto al servicio los mozos pertenecen a esa categoría que no te dejan almorzar en paz porque a cada rato están interrumpiendo para servir más agua o llevarse un cubierto. Para mí fue debut y despedida pues no encontré nada en este restaurante que justifique los precios tan altos de la carta.

Fiesta Gourmet queda en Av. Reducto 1278, Miraflores.
Horario: L-V de 12:30 a 11:00 p.m. S-D de 12:30 a 6:00 p.m.
Ticket promedio: S/.120 por persona.
Teléfono: 242-9009
¿Volvería?: Para nada. Los precios son muy elevados para lo que sirven.

15 comentarios:

Cyrano dijo...

Pues a NO ir se ha dicho.

Gabriela dijo...

Parece que nada salva a este restaurante: ni los precios, ni la calidad, ni la atención.
Confío en tu criterio y coincido en que no iré nunca por ahí.

Kusy dijo...

Hola Renzo que pena que decayera tanto,fui hace tres años y si me gusto.lo que si los precios ya eran altos desde entonces.
Saludos

Renzo dijo...

Cyrano

Pagar mucho para comer mal no es un lujo que me atrevería a repetir.

Saludos

Renzo dijo...

Gabriela

Sólo te recomendaría ir sí un día amaneces con la idea de que te sobra plata. De lo contrario ni lo pienses.

Saludos

Renzo dijo...

Kusy

A mí también me lo recomendaron como un lugar muy bueno. Por eso me cayó como patada al hígado probar un arroz con pato tan mal cocinado.

¿Qué pensaran los turistas a los que le sirven ese bodrio?

Saludos

Pepe dijo...

Si quieren comer comida chiclayana a precios razonables, vayan a Don Fernando, en la Av. Garzón, Jesús María. Su arroz con pato es buenísimo (sin tanta parafernalia como en Fiesta pero con buena sazón), al igual que el seco de cabrito y los ceviches.

Renzo dijo...

Estimado Pepe

Gracias por el aporte. Ya fui una vez por Don Fernando y los resultados fueron muy satisfactorios.

Todavía me falta material para completar la reseña y es un hecho que regreso en el corto plazo.

Saludos

José Trujillo dijo...

Ciertamente, hay restaurantes muy caros que fallan en lo fundamental: que la comida sea rica. Este podría ser un buen ejemplo de que lo caro no necesariamente es rico.

Renzo dijo...

Estimado José

No sólo es caro, es uno de los "consagrados" que fungen de representantes de la gastronomía peruana.

Me decepcionó que no pudieran regresar a la mesa un plato decente. Así sea en mantel blanco y en ollita personal ese arroz con pato estaba para llorar.

Saludos

lizzy dijo...

Para comer un buen arroz con pato, ese restaurante no era la mejor opción. Sé de buena fe lo malo que es. Y lo que más molesta es que el dueño y el "chef" se dicen los abanderados de la comida chiclaya. Por favor!! Hay lugares más pequeños y con mejor calidad de platos.

lizzy dijo...

He vivido en chiclayo 5 años y mi familia es de allá, el Fiesta desde sus inicios nació como uno de esos restaurantes en los que comes solo si tienes dinero y no sales con la mejor impresión. Comer un arroz con pato ahí no fue la mejor opción y lo que más molesta es que se califican como los abanderados de la comida chiclayana.
Hay otros lugares pequeños que son mucho mejores y sales chupándote los 5 dedos.

Renzo dijo...

Estimada Lizzy

Lamentablemente existen algunos restaurantes que saben aprovecharse de la publicidad gratuita que le brindan algunos personajes públicos.

Al menos este blogger no se casa con nadie y no se calla cuando encuentra algo que no vale la pena recomendar.

¡Saludos!

Greglim dijo...

He comido tan delicioso las veces que he ido a Chiclayo que nunca se me ocurriria ir a comer comida chiclayana a un sitio caro como ese. Me entere de la existencia de ese restaurant cuando ampayaron al aprista Mantilla y a un grupo de militares comiendo en un privado. Debe ser el tipico restaurante que se hace conocido porque van los politicos y que generalmente pasan la cuenta como gastos de representacion. En mi lista de restaurantes por visitar este verano no figura el Fiesta, pero si estoy buscando un hueco donde comerme un Chinguirito ya que los que iba ya no existen. En los 80s habia un hueco en Lince, entre Althaus y Bartolome Herrera llamado El Alamo y cuya fachada estaba enchapada en troncos de madera (Se llamo una epoca tambien El Gran Chaparral, Los Tronquitos, etc). Bueno alli atendia un chiclayano ex futbolista del Cristal cuando se llamaba Sporting Tabaco y tambien estuvo en la Seleccion Nacional. Tenia fotos en la pared. Bueno alli llegabas y le decias que te sirva lo que habia porque cada dia variaba el menu. Te traia una fuente de ceviche mixto de chinguirito con Corvinilla con aji limo como es tipico de Chiclayo que era una delicia, mientras lo preparaba te traia unas cervezas heladas y una fuente de tamalitos verdes para picar. Esas cervezas se convertian en 4, 6, una fuente de yuquita amarilla sancochada y mas cervezas. Solo de recordarlo se me hace agua a la boca.

Renzo dijo...

Estimado Greglim

Yo fui porque era una ocasión especial y había escuchado tantas recomendaciones que caí redondito.

Para mí es un "no vuelvas". Demasiado caro y no valió la pena.

¡Saludos!