Estoy sentado frente al computador y no puedo negar cuán melancólico me siento. Los finales suelen ser tristes y más aún cuando me toca escribir el último capítulo de mi aventura por Chicago, uno de los mejores viajes de mi vida.
Noodles & Company
Autodenominado en una propaganda como las Naciones Unidas de los fideos. Y no lo pondría en duda.
Tienen derecho a enojarse. ¿No que el blogger nunca visita franquicias? Pues sí, ese aún es mi credo pero si hubieran visto la tormenta que hubo aquella noche entenderán porque me refugié en el primer lugar que encontré bajo techo. Confieso que pensé en Giordano’s pero una multitud de gente ya me había tomado la delantera. De todas maneras la idea era satisfacer mi curiosidad y ver qué de interesante podría encontrar en esta franquicia que, según la publicidad, ofrece platos con fideos de todas partes del mundo. Desde lo más simple como los fideos a la mantequilla, pasando por los clásicos spaghettis con albóndigas hasta un impensable Bangkok curry. Y para combatir el frío nada mejor que una sopa de pollo y verduras con la receta de la abuelita.
Japanese Pan Noodles |
Obvio que no sería tan simple de ordenar pasta italiana. Vamos, hay que romper la costumbre de pedir fideos con salsa roja. Inicio mi aventura con los Pad Thai, lo más parecido que encontré en Chicago a un tallarín de chifa al paso. La gran diferencia es el uso de los fideos de arroz que ¡oh, maravilla! estaban al dente y se integraban muy bien con el sabor de los langostinos. Sigo con unos Japanese Pan Noodles, fideos udon salteados en salsa de soya y hongos japoneses donde también destacó la textura caramelizada de la pasta. Como me gustaría ver en Lima ese manejo de la pasta. Si bien los precios son económicos el truco de de esta franquicia es ofrecer por un costo adicional carne, pollo o langostinos para que el plato sea más contundente. Y nada me alegro má que ver al administrador acercarse mesa por mesa indagando sobre la calidad del pedido y haciendo sugerencias para una próxima visita. Algo impensable en cualquier franquicia peruana. Y lo digo sin ningún reparo.
Noodles & Company queda en 180 North Michigan Avenue.
Einsteins Bros Bagels
Una y otra vez he sido derrotado por los bagels. Esta vez tampoco fue la excepción
Mi desayuno invariablemente siempre incluye dos panes franceses con mermelada, paté o lo que haya en ese momento en el refrigerador. A veces prescindo del pan en beneficio del yoguir con cereales o un nutritivo bol de avena con arándanos. Contundentes no son pero al menos me mantienen satisfecho hasta la fruta de media mañana. Por eso es que no
entiendo por qué durante mi estadía en Chicago nunca pude terminar un bagel. ¿Por qué?
Uno de esos días en los que buscaba desayunar algo diferente a lo que me brindaban en la oficina decidí dar una vuelta por los alrededores. El logo tan simpático del local fue lo que me motivó a entrar pero cuando observé la vitrina y sus más de diez variedades de bagels entendí que tenía demasiado por investigar.
Uno de esos días en los que buscaba desayunar algo diferente a lo que me brindaban en la oficina decidí dar una vuelta por los alrededores. El logo tan simpático del local fue lo que me motivó a entrar pero cuando observé la vitrina y sus más de diez variedades de bagels entendí que tenía demasiado por investigar.
Tasty Turkey |
Punto aparte para sus pasteles dulces, sobre todos los espolvoreados con canela y azúcar pues acompañados de un café americano quedaban a pedir de boca. Todavía queda demasiado por contar acerca de este local pero no volvimos a encontrarnos en el resto de mi estadía. Claro hice un intento en el aeropuerto de Houston pero con el vuelo a punto de despegar ni siquiera pude saborearlo adecuadamente.
Para ubicar la tienda más cercana visiten su web http://www.einsteinbros.com/
Mariano’s (El oasis del blogger)
Una de las recomendaciones básicas para ahorrar dinero cuando uno viaja es darse una vuelta por el supermercado. Por lo visto en mi oficina tuvieron la misma idea.
Antes de viajar me enviaron de la oficina principal una relación de lugares que podía considerar a la hora de salir a cenar. Como el hotel se ubicaba en una zona céntrica sabía que en los alrededores había variedad de restaurantes y franquicias, el problema era como encontrarlos. Créanme que las distancias son enormes y como el clima después de las 6:00 p.m. no es muy amistoso (el viento que viene del lago Michigan es tirano) perderse es un riesgo a considerar. Pero como el blogger siempre se adelanta a las situaciones gracias al Google Maps ya tenía marcada la zona. Sin embargo una de las recomendaciones llamó mi atención. ¿Qué de bueno puede tener un supermercado? Vamos, acá en Wong salvo que hablemos de las comidas envasadas no se me ocurriría visitar uno a la hora de cenar.
Mariano's es un supermercado de dos pisos abierto desde las 6.00 a.m. hasta las 10.00 p.m. El sueño de todo ejecutivo ocupado que busca algo rápido para cualquiera de sus tres comidas. Y es que no sólo tienen envasados, hay estaciones de smoothies, comidas preparadas e incluso una pequeño food court para que uno disfrute lo adquirido. Cuantos fines de semana me senté allí para comer feliz mi yogur con ensalada de frutas y jugo de naranja fresco. Dudo que vuelva a disfrutar desayunos tan buenos.
Antes de viajar me enviaron de la oficina principal una relación de lugares que podía considerar a la hora de salir a cenar. Como el hotel se ubicaba en una zona céntrica sabía que en los alrededores había variedad de restaurantes y franquicias, el problema era como encontrarlos. Créanme que las distancias son enormes y como el clima después de las 6:00 p.m. no es muy amistoso (el viento que viene del lago Michigan es tirano) perderse es un riesgo a considerar. Pero como el blogger siempre se adelanta a las situaciones gracias al Google Maps ya tenía marcada la zona. Sin embargo una de las recomendaciones llamó mi atención. ¿Qué de bueno puede tener un supermercado? Vamos, acá en Wong salvo que hablemos de las comidas envasadas no se me ocurriría visitar uno a la hora de cenar.
Mariano's es un supermercado de dos pisos abierto desde las 6.00 a.m. hasta las 10.00 p.m. El sueño de todo ejecutivo ocupado que busca algo rápido para cualquiera de sus tres comidas. Y es que no sólo tienen envasados, hay estaciones de smoothies, comidas preparadas e incluso una pequeño food court para que uno disfrute lo adquirido. Cuantos fines de semana me senté allí para comer feliz mi yogur con ensalada de frutas y jugo de naranja fresco. Dudo que vuelva a disfrutar desayunos tan buenos.
Sin embargo durante mi recorrido por la tienda no podía dejar de sorprenderme en cada estante. Cuando vi la congeladora de Häagen Dazs casi me pongo a llorar. Incluso había sabores de edición limitada cuya existencia desconocía. En la sección de snacks las papas “in the kettle” fueron la locura. Es cierto que en el Perú tenemos las mejores variedades de papa sin embargo es muy difícil (No se me resienten los de Viva la Papa, valoro mucho su producto) que podamos superar la calidad de sus papas fritas artesanales. Y sin son fanáticos de las Chips Ahoy aquí había cerca de diez variedades, la Chunky con inmensos trozos de chocolate, la especial con trocitos de Reese's y no paro de contar. Sin embargo todavía me esperaba una sorpresa. En el segundo piso del local hay una sección dedicadas a varios países del mundo: Italia, Alemania, México Israel sólo para dar una idea. Se podía encontrar totopos artesanales, pasta italiana artesanal, chocolates alemanes.Todo un paraíso para el blogger ávido de probar nuevos sabores.
Así que ya saben, ninguna ruta gastronómica está completa sin una visita al supermercado. Y si es Mariano's les aseguro que una visita no será suficiente.
Así que ya saben, ninguna ruta gastronómica está completa sin una visita al supermercado. Y si es Mariano's les aseguro que una visita no será suficiente.
Mariano's queda en 333 E Benton Pl, off Upper Randolph.
Garrett's Popcorn (Area 51)
Cuando estaba paseando con unas amigas españolas por la Magnificent Mile una de ellas gritó: "¡Mira! ¡Garret's! ¡Tenemos que ir ahí!" En mi cabeza pensé: "Tanta bulla por una lata de canchita". Que equivocado puedo esta a veces.
A ver. Partiendo del hecho que soy una de las pocas personas que hace años no como canchita (échenle la culpa a mi dentista) ¿cómo podría evaluar un sitio que produce el mejor popcorn artesanal hace más de 60 años? Es que en Garret's no se andan por las ramas. Entren a su web para que vean la cantidad de sabores que ofrecen. Y sobre todo en que presentaciones.
Lo divertido de esto es que no tuve que ir a la tienda para probarlo. Mientras estaba en la sala de proyectos con el resto del equipo sentí un murmullo recorriendo el ambiente. De uno en uno los participantes se iban levantando hasta que la noticia llegó a mi mesa: "Han traído pop corn de Garret's" Cuando salí al hall ya había una cola parecida a las que hay delante de la Reniec antes de elecciones. No quise quedarme atrás y aproveché para llenar sendas bolsas con el Garret Mix (caramelo y queso cheddar) Suena impensable pero terminé con la mano amarilla y los dientes tronando pero feliz de la vida. Y es que mezclar el mejor caramelo hecho con azúcar rubia con la intensidad del queso cheddar es una idea que nunca hubiera imaginado
Considero que este popcorn es una tentación y lo peor es que se puede comprar en unas latas que dejan chiquitas a las que venden en los cines peruanos. Están advertidos. Una vez que comiencen a probarlos, no podrán parar.
Garrett's Popcorn Queda en 625, North Michigan Avenue.
Para conocer otras tiendas visiten la web http://www.garrettpopcorn.com
Magnolia's Bakery (El blogger se cobra la revancha)
Haber recorrido Nueva York en 48 horas suena descabellado. Haber dejado de conocer tantos lugares suena peor aún. Pero la vida siempre me da oportunidades de cobrarme la revancha.
En mi segundo viaje tenía como meta recorrer todas las chocolaterías del downtown y hacer un raid por Eataly. Sabía que era una carrera contra el tiempo porque con el feriado de Thanksgiving no habría una segunda oportunidad para ir de compras. Recien bajado del avión no tuve otra opción que salir disparado con mi mochila antes que las tiendas cerraran. ¿Se imaginan al blogger caminando con sendas bolsas de papel y una mochila inmensa llena de chocolates?
Sin embargo toda esta carrera valió la pena pues al día siguiente tuve la oportunidad de hacer realidad uno de mis sueños: presencia un corso de Acción de Gracias. Hasta logré tomarme una foto con una mascota de pavo real.
Sin embargo toda esta carrera valió la pena pues al día siguiente tuve la oportunidad de hacer realidad uno de mis sueños: presencia un corso de Acción de Gracias. Hasta logré tomarme una foto con una mascota de pavo real.
Pero la meta era probar los postres de Magnolia's Bakery, local que no logré visitar en Nueva York porqué estaba repleto cuando pasé por el. Primero ordené su famoso banan pudding, un flan hecho con plátano, pudín de vainilla y wafers de vainilla. ¿Les soy sincero? Resultó más empalagoso que un suspiro limeño y eso ya es mucho decir. Felizmente que compré la porción más pequeña. Obvio que no dejaría pasar la oportunidad de probar los verdaderos cupcakes el clásico Red Velvet con un frosting de vainilla imposible de encontrar en Lima, el Humming Bird
con plátano (¿otra vez, blogger?), pecanas y piña que resultó muy agradable y el Chicago Cupcake hecho de chocolate y cubierto de un frosting azul imitando al lago Michigan. Pero aún faltaba más, desde que era fan de la serie Seinfeld me quedó la intriga del Devil's Food Cake. Hecho con cocoa holandesa y cubierto de crema de chocolate es todo un reto para los que siempre buscamos la mejor torta de chocolate.
Siempre consideré a Ginebra como una de las ciudades donde mejor la pasé en mi vida pero Chicago superó cualquier expectativa. Trabajar en los Headquarters junto al equipo a cargo del proyecto y conocer al Chief Operating Officer de la compañía fueron sueños ques siempre anhele cumplir en mi vida profesional. Tengo una lista de tantos gratos momentos en esta ciudad. Incluso cuando hubo una tormenta y fui, literalmente arrastrado por el viento, no negaré que fue una experiencia divertida. Y si hablara de la gente de la ciudad pues siempre fueron amables y corteses sobre todo cuando me veían caminando con mi cara de turista perdido. Creánme que al momento de tomar el avión de regreso mis ojos se humedecieron por lo bien que me trató la Windy City.
Adiós Chicago, sé que nos volveremos a ver. Con frío o con viento o con tormenta de nieve el cariño siempre estará ahí.
1 comentario:
Suele pasar cuando se viaja, se viene una dicótoma mental: quiero regresar a casa, pero no me quiero ir de este sitio al que ya aprendí a querer.
Ojalá puedas volver.
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