domingo, 23 de diciembre de 2012

Pan de la Chola (Pan de verdad)

¡El último post del año! Increíble como se fue tan rápido este año del dragón. Para el blogger ha sido realmente un año de locos pero de eso hablaré más adelante. Mientras tanto les dejo el post que despedirá este 2012.

Vista del ambiente donde se prepara el pan
El Pan de la Chola es un local como pocos. Aquí se prepara pan artesanal sin aditivos ni mejoradores. Muy diferente a lo que estamos mal acostumbrados a comprar en panaderías o  supermercados. La receta es, según su creador Jhonatan Day, "una mezcla simple de harina, sal y agua que busca resaltar los sabores propios de las fermentaciones naturales de granos de trigo, centeno, entre otros" Por estas características tan especiales es probable que la primera vez sea difícil de consumir. El pan de la Chola es ácido, tiene una corteza muy dura y su textura es algo ligosa. Es un gusto que debe adquirirse con el tiempo.

Tostadas de pan de semillas
En el Pan de la Chola no hay carta. Cada producto y su precio está señalado en una pizarra. Yo quise empezar con un capuccino preparado con café orgánico pero fallé en gran estilo. No soy un experto en cafés y quizá eso es lo que me impidió terminarlo porque estaba muy cargado, con un sabor demasiado amargo. Para acompañarlo ordené una porción de tostadas de pan de semillas, servidos con mantequilla artesanal y queso fresco. Imagínense si el pan de por sí es duro como quedará tostado. Me pareció de muy mal gusto que el pocillo donde venía el queso estaba quiñado por varias partes. Las tablitas de madera en las cuales sirven los sándwiches tampoco me dan mucha confianza. ¿Cada cuánto tiempo las cambiaran?

Sándwich de mortadella italiana
Después pedí un sándwich de mortadella que me recordó a los que he probado en los mejores desayunos de hotel. El pan utilizado era la focaccia con sal de Maras y romero, untado con queso crema y con una porción generosa de mortadella italiana (No confundir con la mortadela a granel de supermercado) Desde la primera vez que la compré en este local su focaccia me dejó una excelente impresión y considero que es el pan más rico de toda la variedad que ofrecen. Por su tamaño el sándwich tranquilamente alcanza dos personas. Lo digo en serio.

Es relevante mencionar que esta panadería funciona bajo el concepto de autoservicio. Tienen que pagar su pedido en barra e ir a recogerlo. Es lo que me dieron a entender porque cuando trajeron mi taza de café, un poco más y me la tiran en la mesa. Además cuando pedí un vaso de agua para pasar el mal sabor de boca del café, una de las chicas del counter me señaló una mesita donde había una jarra y vasos para que yo mismo lo hiciera. Entiendo que no es un San Antonio pero estando el local con sólo dos mesas ocupadas creo que no le costaba nada de trabajo servírmelo. Considero que el jarrito para dejar propinas en el mostrador es parte de la decoración porque con ese servicio no les hubiera dejado ni S/.0.10. Al final siempre queda la opción de comprar los panes para llevar y consumirlos tranquilamente en el malecón mirando el mar.

El Pan de la Chola queda en La Mar 918, Miraflores.
Horario: Martes a sábado de 8:00 am. a 8:00 p.m. Domingos de 9:00 a.m. a 6:00 p.m.
Ticket promedio: S/.25.00
Volvería: De vez en cuando pero sólo haría compras para llevar.

Post Data: Adiós 2012
Se va el año y en estas épocas cuando estamos viviendo a un ritmo desenfrenado creo que es bueno hacer un alto y pensar en lo que hemos hecho durante el año. Olvidémonos por un momento de la carga laboral, del tráfico infernal y de la preocupación por las compras navideñas de última hora. Y eso sin mencionar la infame publicidad que abunda en los medios ¿Han visto esa infame campaña de la "nueva navidad" de una tienda por departamentos? La novedad será para el marketero que sólo busca incrementar las cifras de ventas.

Pero busquemos el sentido positivo y pensemos como sería una nueva Navidad. En lugar de comprar regalos hacerlos nosotros mismos para nuestros seres queridos. En lugar de preparar una cena fastuosa cocinar algo sencillo y utilizar el dinero para hacer donativos a quienes los necesitan. No es necesario organizar una chocolatada para doscientos niños. A nuestro alrededor siempre habrá alguien que necesite de nosotros. Una palabra, una llamada, un gesto vale más que un regalo comprado en la tienda más lujosa.

Por un momento sentémonos y pensemos ¿Qué hemos hecho de bueno en este año? Así como los niños dicen: "Si me he portado mal Papa Noel no me traerá regalos" tratemos de enumerar nuestras buenas acciones y ver si estamos listo para recibir la Navidad con un espíritu renovado alejado de las distracciones mundanas. Como siempre digo, en este blog nunca se hablará de religión, deportes o política pero una vez al año me tomo la licencia de contribuir con algunas palabras que sirvan de reflexión. Total, no sólo de pan vive el hombre. 

¡Les deseo una Feliz Navidad y un Año Nuevo 2013 lleno de éxitos!

jueves, 6 de diciembre de 2012

A quien madruga II

¿Tan rápido llegamos a Diciembre? Ahora que terminó la primera parte del proyecto académico en que estoy involucrado puedo darme tiempo para escribir más seguido y terminar de una buena vez la trilogía de los desayunos y la del Swissôtel.

Famoso por motivos que no vale la pena recordar, el hotel Golf los Incas es uno de esos sitios que despertaba mi curiosidad pero que siempre dejaba "para una siguiente ocasión". Aunque después de leer esta reseña se darán cuenta que no se perdió mucho con la espera. ¿Quién diantres me lo habrá recomendado? Este limitado desayuno buffet consta de tres estaciones: jugos y cereales, sándwiches fríos y bocadillos calientes.

Estación de jugos y fruta fresca
Comencé por la estación de jugos donde encontré los clásicos de papaya, piña, fresa y naranja. Suficiente para crear un jugo surtido a mi gusto. Punto a favor de ellos, ponen cucharitas dentro de las jarras para remover el jugo cuando se asienta la pulpa. Aunque no lo crean este es un detalle que muchos hoteles dejan pasar. En cuanto a las frutas frescas no había mucho para escoger así que, resignado, me serví un poco de cereal con yogur. Como para imaginar que estoy tomando un desayuno ligero.

Estación de sándwiches fríos
En la estación de sándwiches fríos tenían lo justo: jamón inglés, del país, de pavita y algunos quesos.  También habían sendas canastillas de panecillos dulces para acompañar el café y salados para prepararse un sándwiches al gusto. Por la poca variedad y la disposición la estación me recordó más a esos coffee break que sirven de cortesía en las reuniones corporativas o en cursos de capacitación. No esperaba ver prosciutto italiano pero tengo la impresión de que podían ofrecer algo más.

Estación de piqueos calientes
Para terminar probé algunas opciones calientes. Las pizzitas y el chicharrón de pollo se me antojaron muy pesados para desayunar, igual con las brochetas de lomo (Por el recalentado el lomo se recocina) y las boliyucas. Felizmente había una estación de huevos preparados al momento donde me saqué el clavo con mi clásico omelette de champiñones. Suficiente para completar la reseña pero no para convencerme de volver. No es que sea malo sino que la variedad es demasiado simple como para justificar el precio. Creo que las cinco estrellas crean demasiadas expectativas y después de esto me queda claro porque en mi ranking personal las cadenas internacionales seguirán ocupando los lugares de vanguardia. Sí, señor.

Hotel Golf Los Incas queda en Av. Cerros de Camacho 500, Surco.
Horario: Lunes a domingo de 06:30 am a 11:00 am.
Ticket promedio: S/.49.00 por persona
Teléfono: 709-0000
Volvería: No, sólo fui para sacarme la duda.

lunes, 3 de diciembre de 2012

Guerra de risottos

¡La aventura del risotto! Este tradicional plato italiano llegó para quedarse pues desde la primera vez que lo comí ya lo he pedido en infinidad de variantes: clásicas, fusiones y otras poco afortunadas (desconfíen de las franquicias). Pero en este post sólo pueden estar aquellos que me dejaron una experiencia memorable.

Aïoli: El primer risotto
Risotto al pesto con milanesa
Aïoli tiene la exclusiva de ser el primer restaurante donde me animé a comer risotto. Su milanesa de pechuga con risotto al pesto es uno de esos platos ideales para almorzar ligero y regresar a la oficina sin esa desagradable sensación de modorra. Es el clásico arroz arbóreo mezclado con un pesto de albahaca, parmesano y pecanas, suficiente para convertirme en un aficionado a este plato. Me gustó el toque de albahaca suficiente para dar sabor y no caer pesado. La milanesa hecha de filete de pechuga es el complemento ideal porque satisface pero no llena. Prometo volver por el risotto de hongos silvestres (aunque ya no esté en la carta pero lo prometido es deuda)

Aïoli queda en calle Germán Arias Schreiber 253, San Isidro.
Horario: Lunes a viernes de 12:30 a 3:30 p.m
Ticket promedio: S/.30 por persona.
Teléfono 222-5114.

Los Bachiche: Risotto a la peruana
Risotto de lomo saltado
Como era de esperar en Los Bachiche no se andan con tutías. Sus platos vienen servidos en porciones contundentes (sólo recuerden el stufato de tira "para toda la familia") que uno sólo puede ver con resignación. Su risotto con sabores de ají amarillo coronado por una porción de lomo saltado tampoco se queda atrás. Mezclar los jugos de la carne con el risotto puede ser una experiencia fuera de este mundo, sobre todo cuando la carne está cocida en en punto exacto y no han abusado de los condimentos. Los tomatitos cherry y los champiñones son el toque travieso que le da otra dimensión al plato. Recomendable pero, ¡no se olviden de hacer reserva!

Los Bachiche queda en Av. La Paz 1025, Miraflores.
Horario: Lunes a domingo de 12:30 p.m. a 3:30 p.m.
Teléfono 221-9283
Ticket promedio: S/.75.00 por persona.

La Locanda: Oda al risotto
Risotto de cambozola y confit de pato.
No iba a dejar pasar la oportunidad de probar este plato en mi restaurante favorito. El confit de pato en risotto de queso cambozola y pimiento morrón aliñado con salsa de naranjita china es una muestra más de la maestría de Augusto Salazar, el chef de La Locanda. El queso cambozola, parecido al queso azul, puede tener un gusto algo fuerte pero se complementa muy bien con el almíbar de naranjita china. Tenía reparos porque conozco su sabor empalagoso pero han sabido como mantener el equilibrio. El risotto tenía el punto cremoso perfecto, y diría que casi le quita protagonismo al confit de pato. Este un risotto de lujo como sólo puede encontrarse en La Locanda.

La Locanda queda en Vía Central 150, San Isidro.
Horario: Lunes a domingo de 12:30 a 3:30 p.m y de 7 :00 a 11:00 p.m.
Ticket promedio: S/.120 por persona.
Teléfono: 421-4400