jueves, 31 de mayo de 2012

Sao Paulo IV: La venganza del blogger.

Vista del salón
He aquí mi confesión. La primera vez que cené en el Fogo de Chao sufrí una derrota tan humillante que aún me duele. Como si fuera un novato me dejé deslumbrar por la gran variedad de piqueos y entradas y luego no pude hacer frente a lo que vino. No pasé de dos cortes de carne y amargamente tuve que aceptar que estaba muy lleno. Yo, un blogger gastronómico experimentado, con toda esa carne a disposición quedé resignado a comer platanitos a la brasa. Pero la vida a veces nos regala una segunda oportunidad y esta vez no la iba a dejar pasar. Este post es la historia de como el blogger se cobró la revancha. También la Providencia estuvo de mi lado porque mis anfitriones tranquilament pudieron haber elegido otro restaurante para cenar.

El Fogo de Chao
Fogo de Chao es una franquicia brasileña muy reconocida. Si menciono que incluso ya tiene 16 locales en Estados Unidos sólo me queda preguntarme cuánto camino le queda aún por recorrer al boom gastronómico peruano. Con más de 30 años de historia es un restaurante de lujo que ofrece cortes de carne al estilo "todo lo que pueda comer". Uno mismo es el que pone a límite los mozos con un pequeño círculo de dos colores. Rojo: "Nao obrigado", verde: "Sim por favor". ¿Simpático, no?. Tambien hay otra ventaja, como los cortes vienen presentados en "espadas" uno puede escoger el término que prefiere de la carne, desde muy cocido hasta "a la inglesa"

El nombre de la franquicia proviene de un estilo de cocinar la carne que usaban los gauchos al sur de Brasil, cavando un agujero, llenándolo con brasas para obtener "fuego del suelo" (fogo de chao) y luego asando la carne alrededor del mismo. El local es muy amplio y acogedor, con un ejército de mozos que está pendiente de todas las necesidades de los clientes y sobre todo que conocen los secretos para preparar una deliciosa caipirinha.

La aventura comienza en una impresionante estación de entradas y piqueos fríos. Pueden encontrar ensaladas ya preparadas, vegetales frescos y cocidos, fiambres, quesos y acompañamientos calientes típicos como el arroz carreteiro y la feijoada. También hay aliños y salsas para aderezar la ensalada al gusto. Consejo de blogger, traten de preparar la ensalada más ligera y fresca posible. Sé que es difícil mantener la cordura ante tal cantidad de ingredientes pero de nada vale llenarse con pancitos y fiambres porque se perderan lo mejor de este restaurante. Hablando en serio, es un truco para que uno se llene y consuma menos carne.

A la mesa irán llegando piqueos típicos de Brasil como la polenta crocante, el pao de queijo (pan de queso, que tendrá un post exclusivo más adelante) y mozarella a la parrilla. Pero no se dejen engañar, esto sólo es una estrategia de diversión del restaurante. Con la experiencia anterior tenía clarísimo el objetivo planteado. Ese mismo día había almorzado muy ligero (pescado y fruta) y no volvería a caer ingenuamente en una estratagema tan obvia.

Cuando se aparecieron los mozos con la carne tenía el panorama muy claro. Me esperaban diez cortes de carne incluyendo cordero, cerdo y pollo. Poco a poco fui ganando terreno; la fraldinha (Bottom sirloin), el bife ancho, el cordero, la costilla de cerdo, todos fueron cayendo uno por uno. Pero aún me esperaba la especialidad de la casa, la picaña. Carne jugosa, sazonada con sal marina, cocida al punto perfecto y con una parte de grasa que la hacía aún más sabrosa. Creo que es una de los cortes más sabrosos que he probado en mi vida. No había defensa posible frente a la inquisitiva presencia de los mozos y terminé aceptando aún dos porciones más de este corte antes de rendirme y declarar un empate técnico. Honestamente mi intención era guardar espacio para el postre.

Me retiré feliz de este restaurante. Reinvindiqué mi autoestima como blogger gastronómico, probé casi todos los cortes de carne, recopilé más información y pude tomar mejores fotos que la vez anterior. Mi segunda visita fue un éxito rotundo. Ahora sí estamos a mano Fogo de Chao.

Fogo de Chao queda en Av. Dos Bandeirantes 538, Vila Olimpia, Sao Paulo

lunes, 28 de mayo de 2012

Sao Paulo III: Pasta al rescate.

Dicen que preguntando se llega a Roma. Yo no le pregunté a nadie y en mi búsqueda por un sitio para almorzar la Providencia me guió a la Alimentaria di Sergio Arno. Si me hubieran dicho que en Sao Paulo iba a encontrar un restaurante de comida italiana así no más a la vuelta de la esquina no lo hubiera creído. Es más, me atrevería a afirmar que no hasta ahora no he comido nada parecido en Lima (Lo siento por la afrenta Dánica, pero lo tuyo es más fusión) El local es bastante sencillo y acogedor, con una decoración sobria sin pretensiones, como si uno estuviera comiendo en casa de los amigos. La carta ofrece diversos platos de comida italiana con la garantía de usar solo pasta artesanal de fabricación propia.

El almuerzo empezó con un paillard de lomo con tagliatelle en mantequilla y salvia. El paillard, "escalopa" en español, es un corte de carne sin hueso que se estira con la ayuda de un mazo para que cocine más rápidamente (Gracias Wikipedia) ¿Cuántas veces han fallado en Lima sirviéndome un lomo reseco sin sabor ni textura? Este corte me pareció buenísimo, suave, bien cocido y con todo los sabores de la carne. Los tagliatelle, con una sazón ligerísima, sólo hicieron acto de presencia en el plato. Suficiente para acompañar la carne pero no para opacar su protagonismo.

También probé sus papardelle con pato deshuesado en aroma de naranja y pimienta verde. Debo confesar que pedí este plato con algo de miedo pero tenía muy claro que no había llegado tan lejos para conformarme con una lasaña boloñesa. El punto de cocción del pato, la presencia muy tenue de la naranja y el toque de los granos de pímienta verde convierten a este plato en un ganador absoluto. Punto aparte para la deliciosa la textura de la pasta artesanal. Como se nota la calidad de un prodcuto así.

Para el postre me debatí entre un clásico tiramisú, un brownie de nutella y la torta delicata de ricotta y frambuesa. Sólo porque deseaba terminar con algo ligero me incliné por la tercera opción. La verdad me hizo recordar a un cheesecake con la jalea servida aparte. Era una masa muy esponjosa con todo el sabor del queso ricotta. En cuanto a las frambuesas yo las prefiero frescas. Esta jalea no me convenció, quizá por la mala costumbre que tenemos los peruanos de comer postres empalagosos. Igual fue suficiente para cerrar un almuerzo espléndido. 

Me fui con algo de nostalgia porque es difícil hallar este tipo de restaurantes. Aquellos donde se cocina con pasión por el cliente, ofreciendo un producto diferenciado en un ambiente sencillo. De mi parte sólo espero que la próxima vez mi hotel se ubique en la misma zona para volver a visitarlos. Nos volveremos a ver, Sergio Arno. Cueste lo que cueste. 

Alimentaria di Sergio Arno queda en Rua Pedroso Alvarenga 545/500, Itaim Bibi.

martes, 22 de mayo de 2012

Sao Paulo II: Todos los días son buffet

Vista del comedor
Toda mi vida he sufrido con los concesionarios de las empresas donde trabajé. La respuesta a mis múltiples reclamos siempre era la actitud indolente y sarcástica de los responsables y yo terminaba siendo el malo de la película. (Créanme, algunas personas que trabajan en HR pueden ser muy peligrosas) El almuerzo nunca será cuestión de juego, es mi momento del día en el cual me relajo y me desconecto de la jornada diaria. Por eso me enojo cuando salgo a la calle y un restaurante me decepciona con una propuesta deslucida o un servicio incompetente. Sin embargo ahora que estuve de visita en la oficina de Sao Paulo pude conocer un concesionario que sería la envidia de cualquier empresa. ¿Se imaginan almorzar todos los días como si estuvieran en un buffet?

En este concesionario el primer lugar lo tiene la estación de ensaladas. Ponen lechuga y tomate a discreción para combinar con los ingredientes que deseen: zanahoria rallada, choclitos bb, tomates cherry, jamón inglés en cubitos, etc. Además también hay aliños como aceite de oliva, vinagre balsámico, salsa de ajo y adicionales como ajonjolí o linaza. Con tal variedad hasta la persona más exigente y cargosa podría prepararse una ensalada distinta cada día y quedar satisfecha.

Estación de platos calientes
Luego viene una estación de acompañamientos donde encontrarán varios tipos de arroz y frijoles. Yo que pensaba que sólo los peruanos estábamos acostumbrados a servir todas nuestras comidas con arroz. Finalmente hay una estación de guisos con carne, pollo o pescado y una opción para los vegetarianos. De lo que probé me llevé una muy buena impresión pues era comida ligera y baja de sazón, ideal para saciar el hambre sin dejar la sensación de llenura tan desagradable de media tarde. ¿Se puede comer aún más sano? Claro, tienen una estación "light" donde las calorías de cada plato son medidas estrictamente. Increíble como se preocupan tanto por su personal.

Mi comida saludable del día
Disfruté de muy buenos almuerzos en este concesionario. Aprendí a escoger opciones sanas y ligeras, me divertí creando diferentes aliños para mis ensaladas y sobre todo comí tal cual lo hacen a diario mis compañeros de Sao Paulo. Los envidio porque durante mi experiencia laboral he llegado a la conclusión que el concesionario perfecto es una utopía Por lógica, el tema de costos siempre afectará el tamaño de las porciones o la calidad de los ingredientes utilizados. Y esto sin mencionar los cambios de última hora sin justificación.

Como anécdota puedes contarles que también pude ejercer como blogger porque a la salida del comedor había una pantalla donde se podía marcar la opinión acerca del menú. Es una excelente manera de conseguir estadísticas en línea respecto a la calidad del concesionario y pude notar que tenían un record impecable. Al menos yo todos los días marqué la opción de "ótimo". Palabra de blogger.

sábado, 19 de mayo de 2012

Sao Paulo I: Business meal

Viajar por motivos laborales es toda una aventura porque uno depende de las coordinaciones que haya hecho la oficina del país que me va a recibir. Después de cinco horas de agotador vuelo fue tranquilizante ver al chofer contratado exhibiendo un cartelito con mi nombre. Al llegar al hotel me esperaba la reserva lista y sólo fue cuestión de minutos hasta que acomodara mi maleta y pudiera disfrutar de una comodísima cama de dos plazas. Esta vez el elegido fue Clarion Faria Lima, ubicado en la zona de Itaim Bibi, muy tranquila y parecidísima a San Isidro. El hotel es ideal para ejecutivos que luego de trabajar una larga jornada sólo desean una ducha caliente, una habitación cómoda y wi-fi para ver de que se han estado perdiendo mientras estuvieron de viaje.

En la mañana me levanté somnoliento por la diferencia horaria (dos horas en contra) y como me esperaba una jornada muy dura no podía excederme en mi primera comida. El desayuno consiste de varias estaciones con todo lo necesario para satisfacer al ejecutivo más cargoso. Frutas para los vegetarianos, yogur y cereales para los deportistas, panecillos dulces y salados para los que gustan de los carbohidratos, café y waffles para los apurados. La verdad se me hizo un mundo decidirme y al final sólo atiné a servirme un café con leche y un par de panes salados con fiambres. Ni modo, el trabajo es primero que el blog.

Pero en la noche volví con todas las ganas de desquitarme y pedí una picaña servida con puré de papas y arroz. ¿Qué puedo decir de esta carne, la mejor que uno puede comer en Sao Paulo? A la mesa llegó un corte de textura suave, rosado pero no crudo, y con todos sus sabores intactos. Me dejaron sin palabras pues si en el restaurante genérico del hotel se podía comer algo tan bueno, ¿cómo sería la experiencia en un restaurante de carnes? Para hacerlo más interesante incluso me trajeron un pocillo con un ají pequeñito pero de picor infernal que nada tenía que envidiarle a nuestro ají limo. Mi desconocimiento del idioma portugués no me permitió saber más de ese condimento.

La última noche de mi estadía ya me sentía satisfecho de tanta carne pero un error al mencionar el nombre del plato hizo que me trajeran a la habitación un filet mignon en salsa de hongos. (Yo quería pollo pero no ayudó mucho que la recepcionista me dijera: "no english") Soy un fanático de los champiñones y los portobellos pero en Lima cada vez están más esquivos porque según me comentó un chef el calor está afectando su producción. Igual acá me saqué el clavo con este deliciosa carne acompañada de una porción muy generosa de distintos tipos de hongos.

Pero todavía me reservaban una sorpresa. En el restaurante había una heladera con un slogan que decía "la felicidad es un helado". Inicialmente pensé que era una exageración pero cuando leí su carta me quedé sin palabras. ¿En cuantos heladerías peruanas se puede comer un helado de vainilla de Madagascar cubierto con chocolate de leche belga? ¿O un helado de chocolate italiano hecho con cacao proveniente de cinco países? Si viajan a Sao Paulo y encuentran el logo de "Diletto, gelato italiano" no dejen pasar la oportunidad de probarlos. Si no, lo lamentarán el resto de su vida.

Clarion Faria Lima queda en Rua Jeronimo da Veiga 248, Sao Paulo.

martes, 8 de mayo de 2012

El blogger año cero

Baby Blogger. =)
¿Cómo se inició este blog? ¿Cuándo nació realmente el impulso de escribir sobre comida? ¿Cómo decidí que entre cine, música y comida me quedaba con lo último como mi verdadero vicio? Hay un post en el que escribí sobre aquel día en el Gourmet Deli cuando disfrutaba una extraordinaria tres leches y me dí cuenta que más gente debería conocer esa pastelería. ¿Cómo podía llegar a la gente? Sin embargo también puedo evocar otros episodios relacionados con el gusto de escribir y el vicio de comer y que realmente son la esencia del blog. A continuación una primera mirada a aquellos sucesos que me convirtieron en un blogger gastronómico que vive para comer.

1.El primer post no fue de comida
Confieso que la primera vez que me animé a escribir algo fue en el colegio. Me habian dejado de tarea escribir dos cuentos, uno con elementos reales y otro de ciencia ficción. El primero trataba de un justiciero que llegaba a un barrio para pelear contra una gavilla de delincuentes. El segundo era la historia de un tiburón gigante que iba a destruir un pueblo pero al final era aniquilado por una flota de barcos. (¿Qué imaginación la mía, no?) Le debo las gracias a mi profesora Abdalú Belaúnde por haberme animado a leerlos delante de toda la clase.

Pero antes de ella estuvo Claudia Mera, la disciplina hecha profesora, que nunca me perdonó ni una coma ni un acento. Todavía me acuerdo como hizo escarnio de un compañero que no había hecho la tarea porque en su casa se había cortado la energía eléctrica. Ella muy suelta de huesos le recriminó "¿O sea usted llega a su casa a las 3 de la tarde y todo son tinieblas? ¡4 de la tarde y tinieblas!". En secundaria llegó la profesora Laura Cohn quien sentenció mi destino con una frase muy jocosa: "Renzo es inteligente pero es payaso" Todo porque en un examen escribí mis respuestas correctas pero a propósito con tan mala letra que luego me bajó un punto por desordenado. Desde acá mi agradecimiento eterno a mis profesoras de lenguaje por haberme guiado a este camino.

2.El blogger aprende a cocinar
Mi primer intento infantil de hacer tallarines a lo Alfredo terminó con la mitad del huevo en el suelo y la mitad de la cáscara en la olla. Tiempo después me aficioné a preparar pudines de sobre (Increíble, hace más de quince años que no como uno). Al final me nombraron experto en preparar pan de plátano, una receta demasiado simple pero que hacía sonreír a la gente que lo comía. Claro que hasta ahora se me hace un mundo tamizar la harina.

Sin embargo fue un suceso más complejo el que me hizo aprender los secretos de las ollas. Con la asesoría de mi madre tuve que hacerme cargo de la cocina de mi casa. Poco a poco fui familiarizándome con los aderezos, con la salsas, con los tiempos de cocción. Quizá me equivoque pero el primer plato que cociné "seriamente" fueron una lentejas de lunes. Luego vinieron el estofado, el adobo y varios platos de la comida casera. Con el tiempo adquirí mi propia sazón (aunque a veces se me va la mano) y ahora cocino por mi cuenta pero teniendo a la mano el tradicional cuadernito de recetas. Gracias mamá por enseñarme a cocinar, aunque hasta ahora no me revelas los secretos de tu asado casero.

sábado, 5 de mayo de 2012

Kickin' Q & A (El blogger responde)

Hace muchos años era fanático del grupo de heavy metal Guns N' Roses. Pasaba largas horas escuchando sus canciones, aprendiendo las letras y tratando de saber algo más de sus integrantes. Sin embargo no había la disponibilidad actual de información y mi única fuente era una que otra revista extranjera (Kerrang!, Heavy Rock, Metal Hammer) que llegara a los quioscos de periódicos. Recuerdo haber leído en alguna de ellas una sección llamada "Kickin' Q&A" en la que cualquier integrante de una banda respondía preguntas a discreción. Ahora que tengo mi blog, y con la participación de los seguidores del Facebook, pude armar un post con preguntas relativas al blog. Espero que sea de su agrado.

1. Una persona como tú a la que le gusta comer y escribir. ¿Qué se cocina? ¿Cuál es tu fuerte a la hora de preparar tus propios alimentos? (Javier Ch.)

Como salgo a comer seguido debo mantener una alimentación equilibrada. Entre semana procuro cenar algo ligero. Por ejemplo, ensaladas (de verduras frescas o cocidas) o guisos sin carne (quinua, menestras). Si no salgo a comer el fin de semana entonces cocino algo más elaborado, usualmente comida casera. También puedo preparar algún postre si cuento con todos los ingredientes .

2. ¿Que haces cuando te invitan a comer en casa de alguien y no te gusta? (Ruth F.)

Hay que aplicar el arte del disimulo, no queda otra. Aún me acuerdo que en casa de una amiga cuando me pasaban una vinagreta horrible siempre volteaba la alcuza de modo que no cayera ni una gota a mi plato. Lo hacía tan bien que todos pensaban que me había servido. El tema del blog también pesa porque esperan que dé una opinión "formal" de lo que me sirvieron.

3. ¿Como financias las visitas a tantos restaurantes? (Elbey B.)

Soy muy metódico con mis ingresos. Las visitas son planeadas de acuerdo a un presupuesto y a un calendario exacto. Si en algún momento debo incurrir en un gasto extra las visitas se pueden diferir para no afectar mi balance. También aprovecho cuando hay promociones con los bancos siempre que no implique el uso de la tarjeta de crédito.

4. ¿Sufres de alguna alergia con algun ingrediente o comida? (Rossana S.)

Felizmente ninguna. Puedo consumir cualquier tipo de ingrediente o aderezo sin problemas. Claro que los excesos nunca son buenos. Además tampoco fumo y mi consumo de alcohol es limitado.

5. ¿Usas Ajinomoto? (Juan Daniel L.)
No es un ingrediente que tenga presencia en mi cocina. Un fondo (caldo de carne con verduras) bien preparado nunca será reemplazado por el Ajinomoto. Lamentablemente no a todos nos sobra el tiempo para preparaciones muy elaboradas así que tampoco condeno su uso en casa.

6. ¿Puedes disfrutar comiendo en un huarique o sólo te ves en restaurantes V.I.P.? (Rocío C.)
Puedo disfrutar comiendo en cualquier sitio mientras se cumplan con medidas básicas de higiene y seguridad. Si los huariques no tienen más presencia en el blog es simplemente por una cuestión de tiempo.


7. ¿Le entras a todo en tus incursiones culinarias? ¿Cuy, sesos, rana, suri, mazamorra de quinua, ¿O te vas por lo politicamente correcto a la hora de probar algo nuevo? (Leonel R.)
Creo que me falta espíritu de Anthony Bourdain pues aún no me animo a probar suri, rana o caracoles. Me consideraría políticamente correcto. Ahora, sí  he comido cuy en el Cuzco y me pareció agradable. La quinua es uno de mis alimentos favoritos ya sea como guiso o como postre.

8. ¿Cuál es tu opinion de la comida instantánea y de la comida fast-food? ¿Cuál es la que no comes? ¿Cuál es la que prefieres?
Comida instantánea sólo consumo en situaciones de urgencia o cuando el tiempo me ha quedado demasiado corto para cocinar algo. Sin embargo suelo incluir ingredientes adicionales (carne, verduras) para mejorar su sabor. Comer una sopa ramen tal cual sale del sobre me parece impensable. En cuanto a fast-food he dejado de consumirla. Es un tema netamente de salud más que de preferencias.

9. ¿Qué piensas de los productos transgénicos? (Félix G.)
No estoy de acuerdo con esos productos modificados genéticamente. Lamentablemente hay demasiados intereses de por medio que perjudican a toda la cadena desde el agricultor hasta el cliente final. Quisiera hablar más del tema pero entraríamos en el ámbito político y no creo que sea muy agradable.

10. ¿Vendrías a Pucallpa si alguien te invita? (Karen V.)
En realidad si visito alguna ciudad del interior lo ideal es conocer a alguien que me indique cuáles son los mejores lugares para comer. De la selva sólo conozco Tarapoto y encontré muy buenos restaurantes.

11. ¿ Algún restaurante te ha ofrecido auspiciar el blog? (Sandro I.)
Todavía no. Me han pedido que vaya como cliente incógnito para darles mi opinión respecto a la atención y  la calidad de su propuesta. También me han invitado a comer para conocer otros platos de la carta pero no para que les haga publicidad. Restaurante que quiera aparecer en este blog bienvenido pero bajo ciertas condiciones que no afecten la objetividad del blog.

12. Despues de tantos recorridos ¿Cuál crees que es el ingrediente esencial para que un restaurant sea exitoso? (María José T.)
El buen servicio. Sea en un restaurante cinco estrellas o uno de menú la clave de todo es el servicio, que se traduce en pasión por el cliente y fijación obsesiva en los detalles. Si el objetivo de un restaurante es ganar plata o que sea exclusivo para cierto tipo de clientes (existen, aunque no lo crean) mejor que lo vendan como terreno.

miércoles, 2 de mayo de 2012

Posts inéditos IV

Cada vez que el blog alcanza un nuevo hito reviso todo lo que se ha quedado en el tintero. Generalmente encuentro fotos de restaurantes a los que no volví porque no tuve tiempo, porque no me convencieron o porque no llegaron a inspirarme lo suficiente para escribir una reseña. Por eso aprovecho la coyuntura para hacer una pausa y dedicarles algunos párrafos a esos restaurantes que nunca llegaron a aparecer en el blog.

El Aguajal
Gallina con menestra
¿Ustedes creen que la foto del costado merece un post? Yo tampoco. Pero si menciono que la tomé en un restaurante cuyo dueño siempre aparece en cierto programa de cable tal vez no se sorprendan. El plato que figura en la foto es una gallina con menestra. El pobre animal habrá muerto deprimido al saber que lo iban a cocinar de esa manera. Los frijoles tampoco pasaron la prueba porque tenían tanto sabor como una sopa de sobre. El arroz chaufa de la selva que comí también estuvo para llorar porque era más grasa que sabor. Ni en un chifa al paso he probado algo tan horrible. Sé que El Aguajal tiene otros locales y espero que realmente cocinen mejor que en el de San Borja. Quizá algún día, en un futuro muy lejano, me anime a visitarlos.

El Aguajal queda en Av. San Borja Norte 886, San Borja.
Ticket promedio: S/.40.00 por persona.
Teléfono: 226-2444

El Candelabro
Concolón de arroz con pato
Uno de los nuevos restaurantes criollo-gourmet que recuerdo haber escogido para un almuerzo de celebración por el Día de la Madre. Esa vez su almuerzo buffet y el adecuado manejo del salón lleno me dejaron con buen sabor de boca. Pero cuando regresé para evaluar su carta no me convenció su concolón de arroz con pato. La razón es muy simple, la insufrible manía que tienen los restaurantes de servir arroces mojados. ¿Por qué no respetar la esencia de este plato tan tradicional? Probé otros platos pero ya no es relevante hablar de ellos porque el restaurante dejó de funcionar. Para mayor inri su local ha sido ocupado por una franquicia de marras. Que pena.


El Huarike II
Fettucinis a la huancaína
Como dije hace un par de años, si algún domingo se levantan sin ganas de cocinar y desean algo económico para salir del paso El Huarike de San Borja es el sitio ideal. Hace algunas semanas volví y noté que siguen con la misma propuesta que satisface pero que no llena. Al menos estos fettucinis a la huancaína calmaron mi apetito pero hubiera tenido que ser muy condescendiente para dedicarles una reseña. Su escabeche, preparado sólo con ají amarillo, también me dejó con más dudas que certezas. Recomendable, sí y sólo si quieren algo para salir del paso. Después no me digan que no les advertí

El Huarike queda en Av. San Borja Norte 401, San Borja.
Ticket promedio: S/.40.00 por persona
Teléfono: 225-1616

Delphos Bistró
Estación de panecillos
¿Un restaurante de hotel en un resumen de posts? Suena a herejía pero debo aclarar que sólo me estoy refiriendo a su propuesta de desayuno buffet, la especialidad del blogger porque ya tengo en mi haber varias visitas a hoteles cinco estrellas. Delphos Bistró me decepcionó con una variedad muy limitada y una estación de panes de baja calidad. Lo más destacable fue el ambiente, un salón muy iluminado, elegante y con una decoración moderna. Por si acaso los delfines ya no se encuentran en el hotel y son el origen de una polémica a la cual me podría adherir pues nunca estaré de acuerdo con el maltrato animal.

Los Delfines queda en Los Eucaliptos 555, San Isidro.
Teléfono: 215-7000

Antica
Pizza Nazionale
Ya me resigné a no escribir un post de este famoso restaurante de pastas. Su carta es demasiado amplia y no basta un par de visitas para escribir una reseña completa. Aunque parezca mezquino incluirlo en un post recopilatorio, Antica no merece quedar en el olvido y debo recomendarles que se den una vuelta para probar alguna de sus innumerables variedades de pizzas. (Advertencia: sólo las pizzas, cualquier otro palto pídanlo bajo su propio riesgo) Al menos la pizza nazionale (chorizo, salame, mortadella nacional, jamón del país) dejaría satisfecho al más exigente. Tampoco dejen pasar la oportunidad de probar sus postres ya que podrían llevarse una agradable sorpresa. Su tiramisú está entre los mejores que he probado.

Antica queda en Av. Dos de Mayo 732, San Isidro.
Ticket promedio: S/.60.00 por persona.
Teléfono 222-8437