domingo, 1 de julio de 2018

Kong (De por qué ir al Centro de Lima)

Dicen que los feriados son para descansar en casa o viajar. Para mí son una oportunidad de oro para salir en busca de nuevos lugares y nada mejor que continuar con mi implacable búsqueda del mejor restaurante para comer dim-sum.

Vista del salón.
Ir al Centro de Lima no es una experiencia muy halagüeña que digamos, mas en mi caso está justificada por la necesidad ir a probar nuevos sabores. Confieso que debo hacer mucha memoria para evocar la última vez que almorcé en un restaurante del centro. ¿Habrá sido el Salón de la Felicidad o en el Fung Yen? Si no fuera porque una amiga japonesa, y compañera de colegio para mayor referencia, me recomendó visitar Kong no estaría de vuelta por estos lares.

Por si aún no logran ubicarlo este local hizo famoso hace algún tiempo por ofrecer en su carta unos min pao con forma de chanchito. Sean buenos o malos, el recurso le funcionó de perillas porque no pasaba un día que no viera en redes sociales fotos de gente comiendo los chanchitos de marras. Si aún se mantienen vigentes, significa que su propuesta merece una oportunidad.

Siu kao. Enrollando de langostino.
Chichonfan de carne. Wo tip cao.
Pido la carta y me alegra ver que no es el clásico anillado conteniendo una relación de platos extendiéndose hasta el infinito ni los banquetes especiales para cuatro o cinco personas. Vamos a lo principal, 26 variedades de dim sum, entre dulces y salados, están esperando a que yo me decida.

Empieza la jornada con el Siu kao "new style"  (S/.15.50). Me decepciona no sentir el picante que menciona la carta, pero eso tiene que ver más con un gusto personal. La clave está en el generoso relleno de langostinos cocidos al punto correcto. El enrollado de langostino (S/.15.00) me deja buen sabor de boca, pero tengan cuidado al comerlo porque el relleno llega hirviendo.  Es relevante mencionar que aquí los bocaditos toman su tiempo en salir de la cocina, buena señal porque significa que no son recalentados como suele pasar en otros lares.

Sa jo fan salteado
Me reconcilio con el chichonfan de carne (S/12.50), pasta cuya textura ligosa nunca ha terminado de convencerme, pero aquí ese detalle queda en segundo plano, tanto que me animaría a repetirlo. El wo tip cao (S/.15.00) es un bocadito relleno de carne y verduras que primero se fríe para sellarlo y luego se termina de cocinar al vapor. Si han probado las gyoza de Naruto Japanese Food ya tienen una buena referencia. 

La idea inicial era comer solo dim sum, pero había que probar otros platos para evaluar adecuadamente la propuesta. En la sopa siu kao con langostinos (S/.24.00)funciona la pasta rellena, pero el caldo pasa sin pena ni gloria. Me hizo recordar aquellas épocas cuando apenas me traían la sopa wantán a la mesa lo primero que hacía era sazonarla con harto sillao. Ordenar chaufa o tallarín hubiera sido muy vago de mi parte así que preferí arriesgarme con el sa jo fan salteado con carne (S/.28.50). El gusto ahumado y la pasta la dente hacen que le dé nota aprobatoria sin dudarlo. 

Zu chai pao.
La jornada debía terminar obligatoriamente con el zu chai pao (S/.13.00), el famoso min pao en forma de chanchito. Ahora entiendo a los cibernautas porque, apenas llegó a la mesa, despertó la emoción de mis cómplices gastronómicas y me pidieron tiempo para tomar hartas fotos. En fin, el relleno de manjar y pecanas sirve para cambiar el sabor de boca, pero no trae mayor ciencia. El he tao bao (S/.13.00) sigue la misma lógica aunque varían las pecanas por nueces. Como anécdota les contaré que tomó más tiempo de lo esperado en llegar a la mesa para desesperación de los comensales que veían como no abandonaba mi mesa vacía de platos.

Me voy más que satisfecho de Kong. Para lo que solía encontrar en el Centro de Lima la experiencia supera mis expectativas con creces. Algo que es importante destacar es la calidad del servicio a la mesa. En todo momento fueron muy corteses y estuvieron atentos a los pedidos adicionales, incluso mencionando cuando iban a tomar más tiempo del esperado. Tengan en cuenta que el local es pequeño y aún teniendo mesas redondas no soporta grupos más allá de cuatro personas. Por las misma razón es harto recomendable ir temprano. Prometo volver pronto para seguir investigando las especialidades de la carta.

Kong queda en Jr. Paruro 836, Lima.
Horario: Lunes a domingo de 09:00 a 21:00
Teléfono: 500 6632
Precio: Dim Sum (S/.14.00-S/.18.00) Fondos (S/.18.00-S/.32.00) 
Estacionamiento: ¿En el Centro de Lima? Ni a de balas. Mejor utilicen taxi.
Volvería: Sí. 

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