Si el tiempo es cruel y despiadado con el blogger, la Providencia a veces se convierte en mi mejor amiga. Y después de tanto bregar estas semanas por fin pude hacer un alto en mis labores diarias... (Claro que ahora vienen mis exámenes finales pero eso es otra historia)
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Vista del resort |
Panamá. El canal. Las playas. Las compras de tecnología (Al menos eso me dijeron nueve de cada diez personas cuando les conté sobre el viaje de marras). ¿Qué más? El blogger emprende un viaje a Centroamérica pero sin haber hecho su tarea previa de averiguar algo de la comida típica del país. Pero ahora que lo pienso bien tampoco habría servido de mucho porque estuve alojado en un resort todo-incluído a dos horas de la ciudad. Resultado: la mitad del tiempo estuve dedicado a labores profesionales y la otra mitad a disfrutar de la playa y el sol. Igual la pasta de blogger (para bien o para mal) siempre está presente y puedo hacer una rápida reseña sobre los buffets que el resort puso a mi disposición.
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Fruta fresca y waffles |
Como ya saben soy un fanático de los desayunos buffet de hotel (En Lima creo que ya no queda ningún hotel cinco estrellas que no haya visitado a lo largo de la historia del blog). No hay nada mejor que levantarse fresco después de un duchazo y tener a disposición una variedad de estaciones con frutas, cereales, panes y frituras (salchichas y tocino frito), quesos y fiambres. Pero lo mejor de todo son los panqueques, waffles y tostadas francesas preparadas al momento. Disfruto como nadie sirviéndomelos con miel, fruta fresca o mermelada. Las posibilidades son infinitas y yo me olvido de la palabra mesura cuando los tengo en mi delante.
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Chow Mein |
A la hora del almuerzo me dejé tentar por los chow mein, fideos chinos fritos a la plancha con salsa de soya en versiones vegetariana y con mariscos, mucho mejor que un tallarín saltado al punto que me envicié con este plato. Me divirtió la cara del cocinero cuando vio que regresaba una y otra vez por sendas porciones de estos fideos. (Y en el vuelo de regreso también me los sirvieron aunque en una versión mucho más simple) Además tuve la oportunidad de probar comida tex-mex: fajitas, tacos y unos inolvidables chili beans con sus nachos encima (Más sour cream, salsa de queso y pico de gallo). Imposible pedir más.
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Crema volteada |
Si hablara de los postres sólo tengo dos palabras: Brownies dark. Lo mejor de todo, había helado a discreción y como venían en mini-porciones no hay sentimiento de culpa al momento confesar que me comí tres brownies con helado. Pero no hay que ser injustos, también estaba el cinco leches, el famoso tocino del cielo y la crema volteada más sabrosa que he probado nunca. Lamentablemente los mozos estaban muy ocupados recogiendo los servicios y no había quien pudiera decirme los ingredientes que usaron porque tenía un sabor y hasta un color diferente. Habrá que googlear la receta de la versión panameña.
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Combo en Taco Bell's |
En mi "día libre" salí del hotel para ir de compras a un mall. El blogger cree en los descuentos pero no en dejar pasar la hora de almuerzo. Lamentablemente sólo pude encontrar restaurantes de fast-food y entre estos se me ocurrió elegir Taco Bell's. Debí haber prestado más atención porque tanto el chico del counter como la chica que preparaba los tacos tenían una expresión de "odio mi vida". Traducción: un par de tacos fríos y un burrito en donde la carne brillaba por su ausencia. Al menos me llené con las papas fritas y sólo porque mi amiga me regaló sus sachets de ketchup. Después de esta experiencia creo que ahora sí me despido para siempre de la comida rápida.
2 comentarios:
Hay un lugar de comida rápida que, con todos sus inconvenientes, nunca me falla: nuestro peruanísimo Bembos.
Y pensaré en lo que más me gusta del blog. :D
Que pena que no tuviste mucho tiempo para visitar los restaurantes de Ciudad de Panamá, hace un tiempo visité uno que me dejó gratamente impresionado: Manolo Caracol, comida de autor en su punto y muy buenos vinos...
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