jueves, 16 de agosto de 2018

De mis restaurantes favoritos: Don Fernando

(Nota: Este almuerzo tuvo lugar el 4 de agosto antes del inicio de la veda del pejerrey)

12.25 Conversar, comer, compartir.
Luego de haber bregado duramente con el irregular tráfico de la avenida Javier Prado, por fin llego a uno de mis restaurante favoritos. Don Fernando Vera-Horna me ha invitado junto a otras bloggers para degustar los mejores platos de su carta. Para ellas será una epifanía de la comida marina, para mí una nueva oportunidad de alcanzar la felicidad, aunque sea por un par de horas.

Empieza la jornada con una degustación de pejerreyes frescos en dos versiones: empanizados y fritos al natural. El empanizado es crocante y se deja acompañar con tártara de y ají de la casa con huacatay. La sorpresa viene con los pejerreyes fritos, no llevan más que un poco de sal y se comen enteros. El punto de fritura es óptima y con esa textura de galleta Don Fernando no acepta remilgos, hay que comer todo el pescado, incluido la cabeza. Vaya, quien lo diría, tranquilamente hubiera acabado yo solo con la fuente.
(Nota: Cabe indicar que este almuerzo se dio antes que se inicie la veda del pejerrey)
Leche de tigre y chifles caseros. Degustación de pejerreyes.


Almejas al natural. Cebiche de cangrejo.
Cebiche de erizos. Cebiche de conchas negras.
Una entrada caliente es suficiente para olvidarnos del clima y prepararnos para los cebiches, la máxima expresión de cualquier restaurante de comida marina. Las almejas vivas al limón son un clásico del local: si no se mueven se devuelven, así de simple. El sabor fresco se complementa con un infernal aliño de limón y ají. El cebiche de cangrejo es un reto, hay que tomarlo con las manos y como si fuera caña de azúcar atacar cada pieza para no desperdiciar ni una sola brizna de carne. Para lo más valientes está el interior, sabores intensos que solo un producto fresco puede traer. Siguen el cebiche de erizos, lenguas gruesas y sabrosas cuya textura es difícil de entender para los néofitos, pero una vez que les coges al gusto no hay marcha atrás. Ojo que en Don Fernando el cliente tiene la razón y si quieren comerlo en chaufa, tortilla o al natural solo tienen que pedirlo a la cocina. Para terminar un cebiche de conchas negras, plato al cual le tengo mucho cariño porque fue en este restaurante donde me enseñaron a comerlo. 

14:15 Pantagruel se sienta a la mesa.
Luego de tamaña introducción es momento de los platos fuertes. Imagínenese la emoción cuando llegan los mariscos al pil-pil. Es sorprendente que ningún restaurante pueda replicarlos siento la receta tan simple: mariscos frescos salteados en aceite de oliva con ají panca y ajos. Lo más divertido viene al final, rodajas de pan para remojar en el aceite de olvia sobrante, una experiencia sublime para todos los comensales. No podía faltar en la mesa el arroz con chancho, un plato caserp que hizo historia en redes pues el vídeo de su preparación ya superó los 18 millones de vistas. Don Fernando no se anda por las ramas y nos trae un cebiche de palabritas para acompañar. La combinación es insólita, mas les aseguro que en boca los sabores explotan y solo hace falta un sorbo de cava para suspirar de felicidad. Este almuerzo no debería acabar nunca.
Mariscos al pil-pil. Cebiche de palabritas. Arroz con cerdo.

No hay almuerzo completo sin postre y llegan los tradicionales picarones con harta miel casera para compartir. Uno para cada comensal y pienso que nos quedaríamos cortos de no ser porque Don Fernando saca una as bajo la manga y sirve un tradicional champús. Este postre no es fácil de encontrar y confirma lo que siempre digo, mis restaurantes favoritos nunca dejan de sorprenderme. Que delicia sentir el sabor de la fruta fresca en una receta con todo el sabor de casa.
Un brindis para celebrar la reunión. Picarones. Champús.

16:15 Nos vamos pero no terminamos.
Fernando Vera Horna y las bloggers invitadas.
Todo tiene un final y llega el momento de cerrar la jornada. Luego de compartir opiniones y elegir favoritos no pueden faltar las fotos grupales para recordar el evento. Don Fernando no se queda atrás y también exige un selfie para sus redes personales. ¿Quién lo diría? La tecnología va de la mano con la tradición.

El almuerzo ha sido un éxito y estoy seguro que cada una de las bloggers invitadas volverá por su cuenta para investigar el resto de la carta o repetir alguno de sus platos favoritos. Yo me quedo pensando en como llegué a este restaurante hace cinco años y en cada visita me retiro con la misma emoción de la primera vez. 

¡Gracias a Rossy (Thatsmellsdelicious), María Claudia (The Foodie Eye), María Alejandra (Lima Food Review), Carla Wong (Carlawongphotofoodie) y Violeta (La foodie china) por acompañarme en esta incursión!

Don Fernando queda en General Garzón 1788, Jesús María.
Horario: Martes a domingo de 
Ticket promedio: S/.70.00 por persona.
Estacionamiento: En los alrededores. Cuenta con vigilancia.
Volvería: Sí, es uno de mis restaurantes favoritos en la historia del blog.

No hay comentarios: